Modesto Emilio Guerrero es
periodista, escritor y analista internacional. También fue diputado nacional y
biógrafo de Hugo Chávez. Escribió varios libros donde analiza el proceso que
vive la República Bolivariana de Venezuela desde la asunción de Chávez en 1999.
Resumen del Sur, accedió a una
entrevista con Guerrero en la que se explican los puntos más importantes del
conflicto iniciado en Venezuela en febrero de este año.
¿Cuáles son los aspectos
principales de la situación actual en Venezuela?
Entre febrero y marzo de este año
Venezuela está viviendo un proceso de guerra civil localizada impulsado por el
antichavismo que se llevó la vida de 37 muertos, entre ellos, 7 guardias
nacionales.
Son focos armados violentos que
promueven la guerra civil. Los principales actores son los paramilitares que
vienen de Colombia financiados por Álvaro Uribe, malandras armados y el Partido
Voluntad popular, sumado a jóvenes ricos sin mucha organización y a los Estados
Unidos.
¿Cómo se podría desarticular?
Diosdado Cabello aseguró que hay
tres mil jóvenes han sido llevados a entrenamiento militar, eso hay que desmantelarlo.
La segunda medida es organizar al chavismo, a través del poder comunal que es
el capital más importante de la revolución bolivariana. Las Fuerzas Armadas
están apoyando pero si llega a ver una vuelta de la violencia no alcanza. Por
eso, es importante fortalecer los niveles de organización del pueblo.
¿Cuál es su opinión de mesa de
diálogo convocada por el gobierno?
Algunas aguas se van a calmar. Lo
importante no es si la oposición asistió o no, sino que hay un sector que
reconoce al gobierno, ya que, desde abril cuando gana las elecciones Nicolás
Maduro, y luego de las elecciones municipales de diciembre del año pasado, el
sector de Voluntad Popular, encabezado por Leopoldo López, tomo la decisión de
ganar las calles y desconocer al gobierno y a las instituciones de la
democracia.
La oposición se reunió con un
gobierno que desconoce, eso es importante. El otro elemento es que la reunión
no arregla nada, porque las causas que condujeron a la derecha a ejecutar estos
actos de violencia fascistas siguen siendo los mismos. Son motivos políticos,
económicos y sociales. Estos dos últimos, el gobierno los está resolviendo
garantizando el abastecimiento de toneladas de alimentos y el control y sanción
de los que especulan con los precios. El problema es político, y es el que
lleva a Voluntad Popular de violentar el escenario apoyado y financiado por
Estados Unidos y paramilitares colombianos, los cuales 11 fueron detenidos.
¿Quién es y cómo surge Leopoldo López?
Tiene 40 años, es un hombre
joven. Refleja una nueva juventud universitaria que está llena de odio al
chavismo porque son parte de la oligarquía venezolana. Tienen una devoción por
Estados Unidos, particularmente por el estado de Florida. Esto se sabía y la
juventud rica siempre estuvo en contra del chavismo.
El problema es que hay una base
social marginal, lumpenizados e hijos de pobres acompañaron estos hechos
violentos en Táchira, Mérida y Caracas.
Fueron la vanguardia en el asesinato. No son los ricos, son los pobres, ese es
un problema del chavismo. Es una fisura importante en su base social.
¿Cómo evalúa el rol de los
organismos regionales?
Mala. La UNASUR ha dejado de ser
UNASUR. Se pronunció recién a los 5 días, luego de que en Venezuela ya había
muertos. Fue al revés del intento de golpe a Correa donde tardaron 24 horas en
defender la democracia ecuatoriana. Es una irresponsabilidad esperar 5 días.
MERCOSUR esperó más y CELAC no se
pronunció. El ALBA fue el único que se pronunció, pero solo eso, mientras
que PETROCARIBE solo tuvo pronunciamiento
de algunos de los países miembros. Esto
es llamativo, porque este organismo se beneficia de la renta petrolera
venezolana.
Cristina, Evo y Correa se
pronunciaron a las 24 horas pero luego hubo un distanciamiento. Correa tuvo un
rol muy secundario y Cristina cometió un error importante en diplomacia
internacional en la sesión de inicio en
el congreso, al separar al presidente de la democracia. Lula propuso un acuerdo
de gobernabilidad con la oposición, es una locura. Lula juega del otro lado
aunque es amigo de Venezuela. Esto es un riesgo para los organismos regionales.
Nadie dice que el gobierno fue quien convocó al dialogo con la oposición. El
único que ha estado presente desde el inicio fue Evo Morales.
¿Considera que hay un avance de
la derecha en América Latina?
Sin duda. Se puede ver en
Argentina con Sergio Massa o en las últimas elecciones en Ecuador. Por eso es
necesario que los procesos regionales no se queden en el camino y avance en las
transformaciones. Si los procesos se frenan y las conquistas se estancan, las
derechas aprovecharán esas debilidades. Todos los procesos son distintos, pero
han podido convivir perfectamente.
Más allá de los gobiernos, lo que
sucede en la región con los Movimientos Sociales es muy importante. Hay un
avance de las izquierdas identificadas con el marxismo, el socialismo o el
nacionalismo y que defienden con toda su energía a la revolución bolivariana.
Por ejemplo, Argentina es el país con más militancia chavista de América Latina
después de Venezuela y Bolivia. Toda esta movilización tiene que trascender a
los gobiernos.
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